El autismo es un trastorno que aún hoy encierra muchos interrogantes. La imposibilidad de establecer una comunicación ordinaria con aquellos que lo padecen genera un gran nombre de enigmas a su alrededor.
En muchas ocasiones se le ha relacionado con genios, o con personas con habilidades extraordinarias. Estos mitos han servido para generar tópicos erróneos sobre el trastorno, ya que por norma general éste se encuentra estrechamente relacionado con el restraso mental.
Algunas características de los trastornos del espectro autista:
Según el manual de diagnóstico DSM-IV se trata de un trastorno del desarrollo. Las edades de detección y diagnóstico son precoces: alrededor de los dos años. El problema principal es la incapacidad de comunicarse y sociabilizarse. Esto se traduce en la dificultad para fijar la mirada con el hablante e interactuar con él. Presentan conductas obsesivas y fijaciones por determinados objetos y colores. Además se adhieren con facilidad a rutinas muy fijas, y cualquier cambio en ellas les ocasiona angustia.
Esto no quiere decir que no puedan establecer lazos afectivos con sus familiares o conocidos. Parece ser que los componentes que facilitan la interacción social están afectados por el trastorno, y este hecho dificulta que muestren emociones o empatía. Aún así con acompañamiento y terapias específicas pueden demostrar cariño a su modo; ¿quién no lo hace así también?
Las causas del trastorno hay que buscarlas en el desarrollo cerebral. Estudios recientes apuntan a cambios que sufre el feto - sobretodo en el sistema nervioso - y que afectará a la formación del cerebro.
Se hipotetiza sobre el efecto de algunas sustancias que pueden afectar al embrión durante el embarazo, entre ellas la nicotina.
Aún así, queda mucho camino por recorrer para conocer sus verdaderas causas. Es un trastorno puramente conductual pues fisiológicamente el niño no suele tener ningún rasgo diferenciador. La dificultad recae pues en la adquisición del lenguaje y la capacidad de relacionarse, entre las otras características ya comentadas.
Hay que tener en cuenta que pese a diagnosticar teniendo presentes ciertas características que se repiten en todos los casos, nos podemos encontrar muchos grados en el trastorno del espectro autista. Así pues, hay autistas de "alto funcionamiento" que tienen un buen nivel de lenguaje y sólo están deterioradas algunas habilidades relacionales.
Por otra parte existe el síndrome de Asperger, un trastorno englobado en esta categoría cuyos síntomas son leves y en muchas ocasiones han pasado desapercibidos. En este caso la capacidad intelectual se encuentra en la media e incluso por encima, y se aprecian algunos rasgos en la comunicación y la fijación por objetos u otros elementos abstractos.
Tratamiento:
Desafortunadamente no existe una cura para el trastorno, ni tratamiento médico. La mejor medicina para aquellos que lo padecen es un buen apoyo social de su alrededor. Terapias relacionadas con animales funcionan muy bien y presentan buenos resultados con importantes mejoras. Así pues la equinoterapia, el tratamiento con perros o delfines es un buen recurso para ayudar a los pequeños a comunicarse con su alrededor.
El contacto con iguales también es beneficioso. En los casos con menor alteración en las habilidades comunicativas se puede llevar una vida normal y una inclusión en la escuela ordinaria con un seguimiento especial. Si el caso es más marcado, no por eso hay que privarlos del contacto con sus semejantes. Se trata de normalizar la situación e integrar al individuo en la sociedad para su salud mental.
Su forma de ver el mundo es distinta a la nuestra, pero perciben igual que nosotros cuando somos acceptados y cuando no. Así pues, una educación en la tolerancia permite aceptar sin prejuicios y querer, de igual modo que ellos lo hacen con su peculiar visión de la vida.
Me dejo innumerables aspectos en el tintero. Es un tema extenso y se puede encontrar mucha información. Hay que tener en cuenta que aunque no tenga la repercusión mediática que debiera, el autismo afecta a 1 de cada 300 niños en España, por lo que su incursión en la sociedad es más elevada de lo que parece a simple vista.
No quisiera terminar sin un pequeño detalle. Para concienciarnos no sólo hoy, sino todos los días; tanto de aquellos que lo padecen como aquellos que hacen posible que su mundo sea un lugar más agradable y menos solitario. Así pues, una mención especial a los padres, educadores y terapeutas que cada día mejoran la calidad de vida de estos chicos y chicas.
Las causas del trastorno hay que buscarlas en el desarrollo cerebral. Estudios recientes apuntan a cambios que sufre el feto - sobretodo en el sistema nervioso - y que afectará a la formación del cerebro.
Se hipotetiza sobre el efecto de algunas sustancias que pueden afectar al embrión durante el embarazo, entre ellas la nicotina.
Aún así, queda mucho camino por recorrer para conocer sus verdaderas causas. Es un trastorno puramente conductual pues fisiológicamente el niño no suele tener ningún rasgo diferenciador. La dificultad recae pues en la adquisición del lenguaje y la capacidad de relacionarse, entre las otras características ya comentadas.
Hay que tener en cuenta que pese a diagnosticar teniendo presentes ciertas características que se repiten en todos los casos, nos podemos encontrar muchos grados en el trastorno del espectro autista. Así pues, hay autistas de "alto funcionamiento" que tienen un buen nivel de lenguaje y sólo están deterioradas algunas habilidades relacionales.
Por otra parte existe el síndrome de Asperger, un trastorno englobado en esta categoría cuyos síntomas son leves y en muchas ocasiones han pasado desapercibidos. En este caso la capacidad intelectual se encuentra en la media e incluso por encima, y se aprecian algunos rasgos en la comunicación y la fijación por objetos u otros elementos abstractos.
Tratamiento:
Desafortunadamente no existe una cura para el trastorno, ni tratamiento médico. La mejor medicina para aquellos que lo padecen es un buen apoyo social de su alrededor. Terapias relacionadas con animales funcionan muy bien y presentan buenos resultados con importantes mejoras. Así pues la equinoterapia, el tratamiento con perros o delfines es un buen recurso para ayudar a los pequeños a comunicarse con su alrededor.
El contacto con iguales también es beneficioso. En los casos con menor alteración en las habilidades comunicativas se puede llevar una vida normal y una inclusión en la escuela ordinaria con un seguimiento especial. Si el caso es más marcado, no por eso hay que privarlos del contacto con sus semejantes. Se trata de normalizar la situación e integrar al individuo en la sociedad para su salud mental.
Su forma de ver el mundo es distinta a la nuestra, pero perciben igual que nosotros cuando somos acceptados y cuando no. Así pues, una educación en la tolerancia permite aceptar sin prejuicios y querer, de igual modo que ellos lo hacen con su peculiar visión de la vida.
Me dejo innumerables aspectos en el tintero. Es un tema extenso y se puede encontrar mucha información. Hay que tener en cuenta que aunque no tenga la repercusión mediática que debiera, el autismo afecta a 1 de cada 300 niños en España, por lo que su incursión en la sociedad es más elevada de lo que parece a simple vista.
No quisiera terminar sin un pequeño detalle. Para concienciarnos no sólo hoy, sino todos los días; tanto de aquellos que lo padecen como aquellos que hacen posible que su mundo sea un lugar más agradable y menos solitario. Así pues, una mención especial a los padres, educadores y terapeutas que cada día mejoran la calidad de vida de estos chicos y chicas.
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